La fotografía urbana alcanza nuevos horizontes con este vibrante retrato que mezcla la audacia de la alta moda con el pulso de la vida de la ciudad. La modelo, centrada y poderosa, viste una falda voluminosa con cascadas de tul multicolor, capturando la mirada y el espíritu de la moda contemporánea. Los complementos, unos pendientes turquesa y unas gafas de sol cat-eye blancas, añaden toques de color que son eco de una personalidad desenfadada y chic.
Esta toma se beneficia de la luz natural y el contraste con el azul intenso del vestido, creando un foco visual que es tanto estético como expresivo. El ambiente urbano brinda un fondo discreto pero estructurado que ensalza la silueta de la modelo y su atuendo vibrante.


